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11 mayo 2007

Zelda


Hoy puedo decir que por fin he terminado el The Legend of Zelda. Twilight Princess.

Tengo que decir que es un juego bueno, muy bueno. Te mantiene con interés durante todo su desarrollo. Te divierte, entretiene, emociona... Lo tiene todo.

La mayor pega que se le puede achacar a este juego es que, como lleva siendo la tónica general de los juegos de aventuras desde hace mucho tiempo, el juego es largo. Y sí, eso es un inconveniente. Un gran inconveniente.

En este caso, por ejemplo, a lo largo del desarrollo de la historia principal aparecen otras subtramas que, aunque están bien desarrolladas y tienen gran interés, te alejan un poquito de la historia original, y resulta algo raro cuando eres el "elegido por las diosas" y tu misión es salvar el mundo.

También me resultan molestos los pequeños giros que tiene la trama a lo largo del juego. El objetivo es uno, pero cuando lo consigues, resulta que no vale de nada si no haces esta otra cosa. Creo que eso está bien al comienzo de la aventura, pero cuando ya llevas muchas horas jugando y vas teniendo ganas de llegar al final, es un verdadero fastidio, porque en ningún momento tienes claro cuanto le queda al juego.

Este problema lo tienen la mayoría de las "grandes producciones" de los videojuegos. Alargamientos innecesarios que no favorecen al juego en si, le restan intensidad a la experiencia y que solo favorecen a los pocos privilegiados que pueden jugar durante 2 o 3 horas cada día.

Creo que el público de los videojuegos se está ramificando mucho. Los que jugábamos a videojuegos hace 15 o 20 años, queremos poder seguir jugando, pero no podemos dedicarle el tiempo que le dedicábamos cuando eramos estudiantes o no habíamos formado una familia. Por eso creo que el mercado debe cambiar, ya que tiene que dar cabida a los nuevos "hardcore gamers" y a los que se van jubilando de esta etiqueta.

Actualmente algunos juegos ya están explorando la posibilidad de juegos por capítulos, en los que se reduce considerablemente la duración del propio juego. Esto es aceptable, siempre y cuando exista una reducción de precio acorde. Aún así, creo que este no es el camino a seguir.

A mi me gustaría jugar a un juego en el que me siga enterando de la trama después de haber estado una semana o dos sin poder jugar con él. Me gustaría jugar de una manera intensa, con partidas de corta duración, sin tener que retomar partidas guardadas desde puntos lejanos. Juegos difíciles, pero no imposibles. Juegos que transcurran por si solos, que fluyan y me conduzcan de una manera natural a descifrar sus enigmas. Juegos que no me traten como a un chaval de 13 años.

Desgraciadamente la gran mayoría de los juegos no son así. Por eso se agradecen y mucho esas pequeñas joyas de de vez en cuando aparecen.

Sobre el Twilight Princess decir que aunque no está dentro de este pequeño grupo de juegos pensados para todo el mundo, sí que es una maravilla jugarlo. Es muy agradable pasear montado a caballo por las praderas de Hyrule y ver esas fantásticas puestas de Sol. Hablar con sus personajes y descubrir lugares secretos. Es un juego excepcional que merece la pena ser jugado y disfrutado.

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